sábado, 12 de abril de 2014

¿Jugamos a casarnos?


Cap 30 parte 2 ¿¡Sí!?
Brenda estaba sobre una rama de árbol que no se veía nada segura, Nico estaba seguro que en cualquier momento se podía quebrar y dejarla caer a casi dos metros de altura. Pero ella sabía lo que hacía, cientos de veces lo había hecho antes y sólo un par de veces se había caído, pero no le había pasado nada grave.
Su cámara fotográfica estaba lista para disparar y obtener la foto que necesitaba para que los “chismosos” no tuvieran la atención en su hermana y Pedro. Se iba a sentir mal por hacer pública esa noticia sin que aquellos chicos pudieran anunciarlo formalmente. Pero todo era para salvar a su hermana, si pensaba en ella entonces se sentía mejor.
Dos jóvenes de no más de 18 años estaban charlando en una terraza mientras tomaban algún tipo de bebida verde que parecía ser un té. Brenda los había estado vigilando desde que llegaron a la ciudad, unas semanas atrás, para dar unos conciertos y había notado un comportamiento extraño en dos integrantes del grupo. Pasaban demasiado tiempo juntos.
Después de un par de días de observarlos se dio cuenta de sus preferencias sexuales, había querido tomarles fotografías desde antes pero no se había atrevido. Pero ahora lo necesitaba.
Ella no estaba en contra de los homosexuales, alguien muy cercano a ella lo era también…
Uno de los chicos se puso de pie y sacudió sus brazos para después frotar sus manos intentando calentarlas.
Hacía un frio que congelaba hasta los huesos.
El otro chico que era más alto lo siguió y después lo abrazó, como se abraza a alguien de quien se está enamorado.
Brenda hizo una toma perfecta.
Después se sonrieron, se besaron y entraron dentro de cuarto de hotel.
Todos y cada uno de sus movimientos ella los había capturado. Se sintió orgullosa de las fotografías. Cuando por fin logró bajar del árbol su pantalón estaba rasgado de una de las rodillas y bastante mugriento en casi todos lados, su chamarra no se había salvado tampoco, hizo una mueca a su ropa y negó antes de salir, sin ser descubierta, en busca del auto de Nicolás que estaba escondido al otro lado de la carretera detrás de unos arbustos.
Brenda jamás había entendido el hecho de que cerca de los hoteles en donde se hospedaban los más grandes famosos hubiera árboles y arbustos y cientos de cosas en donde cualquier paparazi se podía esconder con toda la comodidad del mundo.
Cuando llegó al auto y entró sus dientes castañeaban y sus manos se habían puesto completamente heladas, por suerte Nico tenía encendida la calefacción.
—¿Todo bien? —le preguntó el muchacho viendo raspones en las manos de la chica.
—Vámonos antes de que alguien venga —sugirió la muchacha mientras frotaba sus manos.
El viento empezaba a soplar más fuerte lo que anunciaba que la tormenta de nieve estaba más cerca, Nicolás sabía que no alcanzaría a dejar a Brenda en su casa, apenas si lograría llegar a su casa pero al parecer la castaña parecía perdida en otro mundo observando las fotografías que había tomado y ni siquiera prestaba atención a las palabras que el moreno le decía.
Él metió el auto en la chochera y fue entonces cuando Brenda levantó la mirada para notar que no estaba en la entrada de su casa.
—Esta no es mi casa —dijo la castaña apoyando la cámara en su regazo.
—No. Es mi casa. Si me hubieras escuchado habrías notado que no alcanzaríamos a llegar
a tu casa por la tormenta que ya empezó —la muchacha asintió y tomó la cámara en sus manos para salir del auto.
—¿Por qué una cochera tan grande si antes tenías una motocicleta? —preguntó observando todo a su alrededor, era una cochera bastante espaciosa, podrían caber 3 autos. Era una cochera normal, para su mala suerte.
—Cuando mi madre vivía aquí tenía un par de autos —se encogió de hombros—. Necesitaba una cochera grande.
A Brenda se le formó un nudo en la garganta, sabía muy poco sobre Nico, pero cuando Lali le había hablado sobre él le había mencionado la vida tan horrible que había llevado con su padre y como su madre lo abandonó con aquel abusador. Tragó y lo siguió dentro de la casa en completo silencio.
—Puedes subir a mi habitación a limpiarte o algo —dijo él girándose hacia ella—. En realidad necesitas limpiarte esas manos.
Brenda apretó sus manos en puños a sus costados y empezó a caminar hacia la escalera que se encontraban a un par de metros de donde ella estaba, subió los primeros escalones y se volvió hacia el muchacho que se estaba quitando la chaqueta.
—¿Cuál es tu habitación? —le preguntó levantando una ceja.
—O cierto —musito, por un momento la confundió con Lali, quien ya sabía dónde estaba la habitación.
Caminó hasta ella y juntos subieron al segundo piso hasta llegar a la habitación del moreno, mientras él abría la puerta la curiosidad de Brenda se avivó ¿Cómo sería su habitación?
La puerta se abrió y ambos entraron. Brenda tenía que decir lo que en su mente rondaba.
—Creí que tu habitación tendría calaveras, alguna persona o animal muerto con las tripas de fuera, un foco rojo colgando de un cable, una cama hecha con caparazones de tortugas y una
cobija de dientes de cocodrilo —dijo Brenda observando la habitación sin perder de vista ningún detalle. Suspiró entre decepcionada y aliviada, estaba segura de que la habitación de Pedro era más "terrorífica" que la de Nico. Sonrió, al menos su hermana ya sabía cómo era la habitación de Pitt.
—Sí, gracias por la visión que tienes de mí.
—De nada —le contestó sonriendo—. Te puedes retirar —agitó su mano hacia la puerta corriéndolo de la habitación.
Nico rodó los ojos y se dio media vuelta para marcharse del lugar, cuando estaba cerrando la puerta detrás de él la escuchó decir:
—Gracias por amar tanto a mi hermana.

—De nada —le contestó aunque ya había cerrado la puerta.

Sigue...

Hasta mas tarde!!

Besos
Lunis♥

4 comentarios:

  1. Otrooo, no entiendo mucho a brenda jaja :)

    Arii

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  2. brenda querra allgo con nico o solo la compañia? quien sera elhomosexual ? bueno massssssssssssssss!! masmas!
    besos vero

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  3. massssssssssss me encantaaaaaaaaaaaaa

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