miércoles, 2 de abril de 2014

¿Jugamos a casarnos?

Cap 22 parte 2 ¿Un accidente?
El joven dentro del auto deportivo sólo negó mientras esperaba que el auto amarillo lustroso frente a él se moviera, al parecer el dueño de ese auto era de esos adolescentes que no prestaba atención y había provocado un accidente. El muchacho le hizo una señal y tomó a una chica en sus brazos, no pudo identificar si la chica estaba inconsciente pero mientras la cargaba para meterla en su auto una tela amarilla se cayó y al parecer no se dieron cuenta ninguno de los dos. En cuestión de segundos el auto amarillo arrancó y se fue rápidamente.
El joven del auto negro salió para levantar aquello que se había caído, cuando se inclinó y tomó el trozo de tela amarillo se le hizo familiar, un frio recorrió su espalda y observó hacia el frente, justo donde al auto amarillo se había marchado a toda velocidad.
Negó rápidamente mientras sus manos temblaban sosteniendo esa bufanda amarilla, sólo para cerciorarse que era una mera coincidencia olió la tela para identificar ese perfume, era el que ella usaba, su novia usaba ese olor a durazno.
¿Lali se había accidentado?
Entró a toda prisa al auto y arrancó rompiendo los límites de velocidad, necesitaba encontrar ese auto amarillo, ni que fuera tan difícil buscar un auto con semejante color.
Suspiró mientras veía desesperadamente las calles. Él le había avisado a Lali que pasaría a su casa por ella.
¿Por qué no lo habría esperado?
¿Podría ser sólo una coincidencia?
¿Alguna otra chica que le gustara el amarillo y usara ese mismo perfume?
Entonces detuvo su auto, observó la bufanda en su mano y revisó la orilla de la tela, su novia siempre ponía sus iniciales en prendas como esas. No vio ninguna L, en ninguna parte de la tela. Casi se golpeaba en la cabeza por lo tonto que era. Tomó su celular y marcó el número de su novia, la llamada iba directamente a buzón, se tranquilizó sólo un poco, La siempre se despertaba tarde y al ser un poco más de las 6:20 de la mañana seguramente estaba en la ducha y no había encendido su celular. Intentó creer que eso estaba pasando…

—Eso no se ve bien, La —dijo Pitt nervioso mientras veía de reojo las palmas de las manos de la castaña.
—Sólo fue un pequeño raspón —intentó tranquilizarlo.
—Un pequeño raspón que abarca casi todas las palmas de ambas manos —su mandíbula estaba tensa, temía que Jeanne le estuviera mintiendo, tal vez sí se había lastimado pero no quería decirle para no preocuparlo, era típico de ella.
—Para que te sientas más seguro de que estoy bien vamos a la enfermería de la universidad—ofreció.
Peter estuvo de acuerdo.
Permanecieron en silencio en lo que les restaba de camino para llegar a la universidad, era un silencio incómodo, algo que antes no había sucedido entre ellos.
El muchacho estacionó su auto cerca del edificio de artes en el mismo en donde había visto salir a Lali el día anterior. Suspiró y reposó sus manos sobre el volante. De sus labios salió una pregunta que sorprendió tanto a Lali como a él mismo.
— ¿Cuánto tiempo llevan saliendo? —preguntó.
—En dos semanas cumpliremos 8 meses —contestó la castaña casi aturdida y también sorprendiéndose de contestarle.
Sí antes se habían sentido incómodos esas palabras recién intercambiadas lo había hecho aún más incómodo.
“Llevan mucho tiempo, deberían terminar. Deberías estar conmigo. Yo debería hacerte sonreír de esa manera” pensó Peter pero no lo dijo, permaneció en silencio con sus manos apretando fuerte el volante.
—Gracias —dijo Lali mientras Pitt limpiaba las palmas de sus manos delicadamente con un algodón y un poco de alcohol, sentía las manos hormigueando pero decidió echarle la culpa al líquido en lugar de aceptar que se sentía así por sentir las manos del modelo sosteniendo tan delicadamente las suyas.
Después de terminar de limpiarle las manos le aplicó un poco de pomada para protegerlas durante el día, por suerte era la única zona afectada, aparentemente, y no había sido muy grave, sólo unos pequeños raspones.
Lali sintió un poco de frio al momento en que sus manos fueron dejadas sin la calidez de aquellas fuertes y grandes manos.
Se levantó de la silla y se acomodó su abrigo fue en ese momento en el que sintió que algo le hacía falta, su bufanda.
—¿Pasa algo? —le preguntó Pitt notando cómo tocaba su cuello. ¿Y si se había lastimado?
—Me hace falta mi bufanda —contestó observando el piso de la enfermería.
—Tal vez la dejaste en mi auto —dijo Peter recordando que después del accidente aun la tenía—. Aún tenemos tiempo ¿Quieres que regresemos?
Sólo asintió.
—No está aquí —dijo Jeanne cerrando la puerta del auto—. Tal vez se me cayó y no me di cuenta.
—Lamento la perdida de tu bufanda —la castaña sonrió.
—Era un regalo que Euge me había dado —se encogió de hombros.
—Ya veo —ambos guardaron silencio.
La mañana estaba helada y ellos estaban de pie como tontos al lado de un auto que sobresalía fácilmente por su discreto color amarillo.
Los ojos de Peter se cerraron intentando retener el impulso de abrazarla y besarla… pero gracias a eso una idea tonta y disparatada le llegó. Sí, podría funcionar, podría.
—Lali —habló atrayendo la atención de la chica—. Te quiero.
El corazón de la castaña cayó a sus pies y su boca se abrió pero no logró pronunciar ni una palabra, ni siquiera podía respirar.
—No tienes que decirme nada, pero es la verdad, te quiero como algo más que una amiga y aunque nos hayamos separado estos años aun te sigo queriendo y sé que dentro, tal vez demasiado dentro de tu corazón tú sientes algo por mí…
—Tengo novio —dijo interrumpiéndolo.
¡Perfecto! Estaba funcionando.
—Lo sé, pero que tengas novio no significa que lo quieras o que lo ames…
—No es de tu incumbencia —estaba empezando a enojarse.
—Lo sé.
—No digas más “lo sé”
—Bien, entonces déjame besarte —La retrocedió un paso de Pitt—. Sí me dejas besarte sólo esta vez no te molesto —ella iba a hablar pero ni siquiera la dejó—. Sí te beso y tú no me tocas eso significa que no sientes ni sentiste nada por mí, pero si me tocas será lo contario.
—Estás loco…
—No, las emociones se dirigen por sí mismas, sólo tienes que aceptar y ya…
—Bien, bésame. No importa —dijo pero en realidad sus manos temblaban.
Pitt asintió y se acercó a ella para inmediatamente romper la distancia con un beso.
La besó tan profundamente como si necesitara de ella para respirar, con una mano la rodeó por la cintura apegándola a su cuerpo, él nunca dijo que no la podría tocar, y con la otra mano sostuvo su cabeza desde su nuca para profundizar el beso.
Lali se sentía de gelatina, dios, había extrañado esos labios, esos besos tan cálidos y perfectos, no se había dado cuenta de cuánto los había extrañado hasta ese momento. Quería romper el beso lo más pronto posible pero ninguno de los dos parecía tener suficiente, gimió en la boca de Peter y él sólo siguió besándola. Ella apretó sus manos en puños para no tocarlo, no debía hacerlo. Nuevamente gimió, no podía más, lo quería tocar, necesitaba poder besarlo como antes lo hicieron, cuando aún eran unos niños…

Se quejó y gimió sin poder resistirse y entonces lo tocó.

Sigue...

Besos
Lunis♥

9 comentarios:

  1. me encantooooooooooooooo ese besoooooooooooooo que tanto querian esos dosssssssssssssss , cada dia te superas massssssssssss eres fantasticaaaaaaaaaaa.

    ResponderEliminar
  2. llego el beso!!! jeje
    en la primera parte era el novio que contaba o pitt?!!

    besos vero

    ResponderEliminar
  3. Ayy lo tocó fijo ahora llega el novio y lali se enoja con Peter quiero massss una pregunta cuantos caps va a tener esta nove

    ResponderEliminar
  4. Si no lo llega a tocar ,la mato yo misma.

    ResponderEliminar
  5. massssssssssssssssssss

    ResponderEliminar